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[010] Los problemas de la fuente de poder

Por: Carlos Crismatt Mouthon

La fuente de poder es una pequeña caja cuadrada que está en la parte posterior del gabinete de nuestro computador, y cumple dos funciones generales, proveer de energía a cada uno de los componentes del sistema y con su ventilador mantener estable la temperatura interna. La fuente recibe la corriente de 110 voltios y la convierte en energía de 5 voltios para la tarjeta madre y 12 voltios para los motores de las unidades de almacenamiento. Pero detrás de esta simple descripción, algunas particularidades de su funcionamiento pueden convertirse en potenciales problemas para el correcto desempeño del equipo.

En primer lugar, cuando encendemos el computador la fuente de poder envía a la tarjeta madre –motherboard- una señal especial conocida como Power Good que la fuente debe recibir de regreso entre 0.1 y .05 segundos después, tras lo cual se inicia el arranque del equipo. Técnicamente, esa señal es de más o menos 5 voltios, y si ésta se altera la fuente de poder no recibirá la señal Power Good y el procesador se reiniciará permanentemente, de tal manera que el computador no prende.

Cuando esto sucede, la mayoría de las veces se busca el problema por el lado del procesador o de la memoria, ya que casi nunca nos percatamos que la fuente de poder existe, y –lo que es peor- que ésta puede ser la causante de tales problemas. En general, no se recomienda reparar las fuentes de poder, ya que lo más importante no es que prendan sino que cumplan las funciones lógicas para las que fueron creadas.

Es así como en la nueva tecnología ATX la fuente de poder ha sido adicionada con nuevas señales, entre ellas la de 3.3 voltios para las nuevas tarjetas madres, la de Power On que permite que el sistema operativo apague el equipo, y la 5v Standby que le da corriente permanente a la tarjeta madre, aun cuando esté apagada. Recuerden que en los equipos ATX no hay botón de encendido y apagado, sino un interruptor para que la fuente reciba energía. Si queremos arrancar el computador debemos presionar un botón que hace que la tarjeta madre le envíe una señal a la fuente de poder para que el equipo se prenda. Y cuando salimos de Windows, el mismo software se encarga de apagarlo.

Por otra parte, cuando el abanico de la fuente de poder se daña, el interior del gabinete se recalienta y el computador se vuelve inestable en las tareas que desarrolla. Con el paso del tiempo -si el problema persiste-, algunas partes pueden acortar su vida útil ó dejar de funcionar. En este caso es recomendable hacer el cambio del ventilador, siempre y cuando estemos seguros que el equipo funciona al ciento por ciento, ya que de otra manera podríamos sospechar que el daño no es aislado y está asociado con algo más grave.

Como dato adicional, en las fuentes de poder de tecnología AT la corriente es suministrada a la tarjeta madre por dos conectores marcados como P8 y P9, que si se invierten pueden causar un daño irreparable. La clave está en insertar los conectores de tal manera que estén juntos el par de cables negros de cada uno de ellos. En las ATX hay un solo conector, de tal manera que no puede ser insertado en una posición invertida, descartando cualquier error.

Se dice que la fuente de poder es inteligente, más que muchos. Cuando hay problemas de voltaje o un cortocircuito se apaga, y después de un breve descanso vuelve a funcionar.

Esta es una serie publicada desde octubre de 2001 por el periódico El Universal de Cartagena de Indias, en la edición de los días sábados de Montería [Córdoba].