Sábado 13 de septiembre de 2003
¿Indignados... doble moral... o 'viudos' del poder?
Por TOÑO SANCHEZ Jr.
Tenía la intención de no escribir sobre el debate electoral hasta
terminar una serie de entrevistas con los candidatos a Gobernación y
Alcaldía que publicará este diario más adelante, pero lo acontecido en la
semana anterior, la ida de Luis Carlos Ordosgoitia del lado de la
coalición que respalda a Juan Carlos Aldana hacia las toldas del aspirante
Libardo López, no da espera.
Primero, creo que la noticia era la salida
de Ordosgoitia Santana, pero el suceso pasó a segundo plano y la noticia
fue la reacción de Julio Manzur y su equipo frente al retiro del ex
congresista. Las explosivas declaraciones del Senador y coequiperos fueron
recogidas por el periodista para señalar lo "indignados" que estaban por
la salida del ex representante.
Veo en esta situación el ejemplo claro
y contundente de lo que se llama doble moral. Antes de seguir con el tema
considero a Luis Carlos Ordosgoitia un buen tipo; honesto, pero demasiado
ingenuo y bueno para ser político. No conozco el primer congresista que no
diga mentiras, pero él se quedó con la fama. Creo que por tratar de quedar
bien con todo mundo y de servirle a seguidores y contrarios terminó por
quedarle mal a todos. Pero mentiroso o no, sacó más de 43 mil
votos.
Las reacciones a su salida fueron de todo tinte, un ex diputado
lo llamó "mentiroso". Otro ex trató de mostrarlo como "desatinado" por
irse. El Senador dijo que sabía por qué se iba, pero que no lo diría. Otro
ex dio a entender que fue por billete. Palabras más, palabras menos, lo
convirtieron en un paria y en un lastre que no querían seguir cargando.
Pregunto, si Ordosgoitia no tiene votos y seguidores, como lo afirman
públicamente y era un tipo que dividía en vez de unir, por qué no lo
separaron de la campaña, antes de permitir que se fuera él. Creo que
deberían estar más bien contentos por su partida y no indignados. Pero es
aquí donde veo el juego de la doble moral. Ahora es que sale a relucir que
el gobernador de Córdoba Jesús María López Gómez tiene una "feria de
contratos", pero hace dos meses, cuando los que hoy lo critican hacían
parte de la llamada "feria", no la había, y no decían nada. Mejor dicho
hace ocho semanas López Gómez no era corrupto, pero hoy sí. No hay nada
más lesivo que una verdad a medias; es más peligrosa que una
mentira.
Lo correcto es que si un congresista o miembro de la coalición
que respalda a Aldana sabe que están saqueando la Gobernación de Córdoba
por qué no cita a una rueda de prensa a denunciarlo. Y no salir después a
echarle la culpa a los periodistas de callar hechos, si son ellos los que
tienen las pruebas. Ya está bueno de cacerías de brujas y verdades a
medias. También está bueno de hablar mal de las administraciones de las
cuales han ordeñado por años, pero que son ladronas cuando dejan de hacer
parte de ellas.
Esto de sentirse indignado es muy subjetivo, creo que
más lo están los electores que vieron cómo congresistas se dejaron
embelesar con las prebendas que les dio Samper a cambio de su
defensa.
También me causa sorpresa la manera como llegaron en gavilla a
la dirección de EL MERIDIANO de Córdoba a pronunciarse. Qué tal que esa
misma diligencia la tuvieran para buscar las soluciones a las inundaciones
de Montería y Córdoba. A si se debe pagar peaje o no por el nuevo puente.
A explicar por qué San Carlos es un pueblo miserable y olvidado.
En
fin, Luis Carlos Ordosgoitia es considerado un dandy si está en un bando,
pero si se pasa al otro es todo un paria. A las 11:00 de la mañana del
pasado viernes 5 de septiembre el 'Boroco' Cabrales estaba citando a la
rueda de prensa para anunciar su retiro, junto con Ordosgoitia, pero a
última hora cambió de opinión. Ese giro que lo hizo abstenerse a última
hora será un "secreto de estado". Pero ese detalle me hace recordar un
hecho sucedido con el 'Boroco' cuando era concejal en la administración
del cura León Pereira.
Junto con el temible Gerardo Pérez Clamerán
habían conseguido un cassette que involucraba al entonces secretario de
Hacienda, Eleodoro Agámez. Citaron en la mañana a los medios y hablaron de
la cinta, agregó Cabrales que la entregaría al día siguiente a las 4:00 de
la tarde. Lo que no sabíamos los periodistas era que estábamos siendo
manipulados y nos prestamos para que él enviara el ultimátum al alcalde
León. Quien antes de vencerse el plazo destituyó a Agámez y así cumplió
con lo que pretendían los conspiradores. Por supuesto que el cassette
desapareció por arte de magia, en ese lapso de tiempo. Algo parecido pudo
suceder el viernes 5.
Pero me he tomado la molestia de investigar por
qué se fue Luis Carlos Ordosgoitia y he encontrado lo siguiente: Al ex
representante le parecía que el aspirante Aldana era absorbido totalmente
por Miguel Alfonso De La Espriella, lo que ocasionaba que el candidato no
lo tuviera en cuenta. Aldana no le pasaba al teléfono a Ordosgoitia, lo
cual lo llevó a manifestarle a cercanos amigos que veía mal esa actitud,
ya que "si como aspirante no atiende a los amigos cómo será cuando esté en
el Palacio de Naín". Pero lo que rebosó la paciencia del ex representante
fue un sábado que se presentó sin su carro a Cereté, luego salían a una
reunión a Sahagún, pero lo dejaron.
En fin, lo triste es que los
cordobeses, los de la franja de opinión, la que según 'seudo analistas'
dicen que no existe, siguen viendo más de lo mismo. No hay presentación de
ideas y proyectos, sino peleas de los que están 'viudos' del poder.
Córdoba tiene tantos problemas que esperamos es escuchar o leer soluciones
viables.
Por otra parte, qué autoridad controla a las emisoras para que
no permitan que locutores sigan ofendiendo a los aspirantes a los
diferentes cargos de elección. Una cosa es la independencia y otra el
respeto.