Sábado 9 de agosto de 2003
Libardo José López
"Me llegó la hora de servirle a Córdoba"
NIDIA SERRANO M.
El Universal
MONTERÍA
El ingeniero monteriano Libardo José
López siempre había estado dedicado a su profesión y a su hogar, el
cual conformó hace 30 años, sin pensar en la posibilidad de
inmiscuirse directamente en asuntos políticos, pese a pertenecer a
una familia de tradición política.
Su primer empleo fue en la firma
López Salas de la cual era miembro su tío Jesús López, quien le dio
la posibilidad de trabajar en la carretera de Aguachica, Cesar,
lugar de Colombia al cual viajó luego de haber contraído matrimonio
con su novia con quien llevaba 7 años. Llegaron a vivir a un
campamento e hizo allí lo que él denomina un curso rural de
ingeniero.
A Montería regresó luego de dos años
cuando fue designado como director del Instituto Nacional para
Programas Especiales de Salud. "Allí tuve una experiencia
maravillosa porque se hacían acueductos y alcantarillados para
poblaciones con menos de 5 mil habitantes. La filosofía era servir a
la gente".
Aceptar la candidatura a la
Gobernación de Córdoba no fue tarea fácil y aunque sus contendores
políticos señalaron que su designación era nepotismo, él considera
que por el contrario hay que destacar la voluntad de servicio que ha
tenido su familia, cuyas designaciones a los cargos públicos han
sido por decisión de los electores.
"De mi padre aprendí su honestidad.
Nos dio únicamente la educación y la vocación de servicio porque las
24 horas del día atendió a todas las personas, independientemente de
su color político".
Casado con Alicia Jiménez Maza, una
mujer a quien define como la mejor madre del mundo, siempre
dispuesta a atender su hogar y los programas sociales que tiene a
través de una Fundación, con tres hijos que son Johana María,
graduada en finanzas; Libardo José, ingeniero civil que ahora lidera
la empresa Lopeca Ltda de propiedad de su familia, y Andrés Felipe,
quien empezó estudios de ingeniería civil en la Universidad
Javeriana, ha conformado lo que el califica como un hogar estable y
sólido donde lo más importante es compartir el tiempo y las
distintas experiencias. Sostuvo que sin el apoyo de ellos no hubiera
emprendido este nuevo reto en su vida, pese a que es consciente que
le llegó la hora de servir a Córdoba.
El Universal entrevistó al candidato con el fin de conocer
los planteamientos que tiene en torno a los más graves problemas que
vive esta sección del país.
¿Por qué pese a pertenecer a una
familia política había mirado los toros desde la
barrera?
"Desde los 12 años salí de la casa a
estudiar en un internado y luego me fui a Medellín a estudiar
ingeniería civil. Terminé de estudiar y me dediqué a mi profesión y
aunque nunca he estado alejado de la política lo cierto es que
miraba los toros desde la barrera aunque siempre le he colaborado a
mi padre, a mi tío y a mi hermano Juan Manuel y por ello conozco las
verdaderas necesidades del Municipio y del
Departamento".
¿Cuándo asume el reto de ser el
candidato de Mayorías Liberales?
"A raíz de la muerte de José Gabriel
Amín, quien había aunado la voluntad de distintos dirigentes
políticos, empezamos a buscar un candidato que tuviera el consenso
del pueblo y que garantizara el triunfo. Yo acepté, con el apoyo de
mi familia, porque sé que esto será un cambio radical en mi
vida".
¿Considera que hubo nepotismo en su
elección?
"No. Mis contradictores pueden decir
lo que quieran. Nepotismo es cuando se nombra a dedo a su familia y
este es un cargo de elección popular. Tenemos una familia con
vocación de servicio y hemos visto toda la vida a nuestros
antecesores sirviendo y sufriendo con las necesidades de la gente.
Asumo con mucha responsabilidad y deseos de servir esta
candidatura.
¿Qué será lo primero en hacer de
llegar a la Gobernación?
"Hay que seguir el ordenamiento que
se está haciendo en casa. El departamento está en un proceso de
reestructuración y hay que terminarlo, además emprender un agresivo
programa de sistematización y de capacitación a los servidores
públicos para que siempre atiendan bien a la
comunidad".
¿Seguirá impulsando inversiones para
el puente de la 41 y respetará el compromiso del actual
Gobernador?
"Ese compromiso lo avalo desde ya
porque Montería necesita esa obra. Con el aporte de la Gobernación
se minimizarán los impactos de los habitantes de la margen izquierda
del río Sinú. Al principio me opuse a la construcción del peaje pero
luego todos cedimos porque entendimos que la obra se
necesita".
¿Qué estrategias implementará para
aumentar la calidad educativa?
"La calidad de la educación en
Córdoba me preocupa mucho y por eso tengo planes de capacitación
gradual de todos los docentes de Córdoba y puedan transmitir a los
niños una mejor educación. He programado hacer campañas desde la
niñez para que quieran a su escuela, es necesario mejorar la
dotación y he pensado replicar el ejemplo de lo que ha hecho la
Fundación San Isidro de Cerromatoso para reunir en un solo lugar a
laboratorios de distintas áreas para que converjan los colegios
oficiales de Montería".
¿Dispondrá recursos para terminar la
famosa Trocha?
"Sí, hay que terminarla. Diligenciaré
recursos que sé que existen para utilizarlos en la culminación de la
Trocha".
¿Y para el Centro de
Convenciones?
"También hay que acabarlo. El
verdadero nombre es Centro cultural y científico para los valles del
Sinú, San Jorge y las Sabanas de Sucre. Ese proyecto nació de la
Universidad de Córdoba y luego se consolidó durante la
administración del gobernador Angel Villadiego. Hay una primera
etapa construida pero lo vamos a terminar, ese y todos los elefantes
blancos que tiene Córdoba".
¿Propuestas macro para el sector
salud?
"Primero lograr con la ayuda del
Gobierno Nacional el incremento de la cobertura en el régimen
subsidiado para llegar al promedio nacional y la segunda es
fortalecer los hospitales regionales con recursos para que sigan
prestando un buen servicio, lógicamente sin abandonar los programas
de vacunación que le merecieron una felicitación a Córdoba por parte
del Presidente".