[206] Trucos clásicos para Windows XP [26]
Por: Carlos Crismatt Mouthon
Los trucos de hoy tienen que ver con los primeros auxilios para arreglar los problemas cuando Windows XP no se quiere iniciar. En el primer caso, cuando se alcanza a ver el logo de inicio, se puede pensar que alguno de los archivos del sistema operativo está corrompido, o que se ha borrado o cambiado el driver de uno de los dispositivos instalados.
Si esto es correcto, Windows XP trata de iniciar la rutina de arranque, pero en cierto punto se detiene. O tal vez puede que la pantalla se ponga azul, con un aviso que indica que hay un error, o la barra indicadora del logo de inicio se congela. En cualquiera de estas situaciones, el truco consiste en comenzar a presionar la tecla "F8" durante la primera fase de ejecución del BIOS -Basic Input/Output System-, es decir, cuando la pantalla está negra y se observa, entre otros, el reconocimiento del procesador, la memoria, el disco duro y la unidad de CD-ROM.
Hay que tener en cuenta que en algunos equipos si se presiona muy rápido la tecla "F8" aparece un mensaje de "error de teclado", tras lo cual hay que reiniciar el equipo. Con esta acción, aparece un menú de opciones avanzadas que permite jugar con algunas alternativas. Como recomendación, la primera que debe utilizarse es "Ultima configuración correcta conocida", la que busca en el registro de Windows XP cuales fueron los últimos archivos y controladores con los que se inició correctamente. Si se tiene activada la "Restauración del Sistema", ésta se hace en forma automática y resuelve el inconveniente fácilmente.
Si es negativo lo anterior, sigue probar con el "Modo a prueba de errores", que omite cargar durante el inicio los controladores de los dispositivos no esenciales, de tal manera que si se llega al escritorio de Windows XP significa que uno de ellos es el responsable del mal funcionamiento. Cumplido esto, lo primero es ir a "Inicio - Panel de Control - Rendimiento y mantenimiento" y en panel de la izquierda seleccionar "Restaurar sistema". Finalmente se marca "Restaurar mi equipo a un estado anterior", pulsar en "Siguiente", se escoge un día del calendario que tenga el número resaltado y se da clic en "Siguiente".
A veces es necesario probar varios puntos de restauración, hasta que se tenga suerte. Si esto funciona, el driver o archivo dañado será reemplazado por el original, y todo volverá a la normalidad. Si el "Modo a prueba de errores" no funciona, la solución entonces es probar la reinstalación de Windows XP, y si es muy grave la cosa volver a instalar a partir de cero.
En el segundo escenario, con la pantalla negra al arrancar, hay que pensar en que los archivos de inicio fueron borrados o que el disco duro está dañado. Si se trata de lo primero, hay que intentar arrancar desde un disquete formateado en Windows XP, y que tenga copiados los archivos "boot.ini", "ntdetect.com" y "ntldr". Este disquete se puede preparar en otro equipo. En el "setup" se programa que el primer dispositivo de inicio sea la unidad A.
De este modo Windows XP busca los archivos de inicio en el disquete y los de la instalación en el disco duro. El truco final es copiar nuevamente los archivos al disco duro, y obviar el disquete, para lo que se abre el símbolo del sistema con "Inicio - Ejecutar", se escribe "cmd" y se da "Aceptar". Allí, se escribe "xcopy a:*.* c:\ /h" -sin las comillas- y se oprime la tecla "Enter". Si el disco duro está bueno, el asunto queda arreglado.
Esta es una serie publicada desde octubre de 2001 por el periódico El Universal de Cartagena de Indias, en la edición de Montería [Córdoba] de los días sábados. |