[229] Los Primeros Pasos [1]

Por: Carlos Crismatt Mouthon

Para muchos, la primera experiencia frente al computador es aterradora. En algunos se mezclan razones del temor a la desconocido y del miedo al oso, especialmente entre quienes tienen ya una posición reconocida. Otros, simplemente se levantan su propia barrera -casi una muralla china- y exclaman con voz segura que ¡loro viejo no da la pata!.

Pero también es significativo el número de quienes vencen esa resistencia y en poco tiempo se afiebran con el computador, el Internet y el correo electrónico. Es agradable ver como las mamás se disciplinan para poder comunicarse a bajo costo con el hijo que se fue a estudiar a otra ciudad o país. No es mentira el comercial en que la abuelita, sentada frente al computador, utiliza el chat.

Quienes pasan del cuarto piso, llegaron tarde al PC -Personal Computer-, pues éste apenas tiene unos veinte años de vida. Sin embargo, quienes se preguntaron que ¿si otras personas lo pueden hacer, porqué nosotros no?, y dieron el primer paso, son el ejemplo de que el computador es cosa de todas las edades.

Los niños y jóvenes tienen la ventaja comparativa de que su curiosidad innata los lleva, sin prevenciones, a probar todo lo que esté a su alrededor. Y para éllos el computador no es más que otra de las cosas electrónicas que manosean a su gusto desde que llegaron al mundo. Mientras los adultos tenemos el hábito de leer primero el manual -dizque para no dañar el equipo-, aquellos utilizan la analogía para saber que todos tienen un patrón común de funcionamiento, que casi nunca les falla. Y algo mejor, practican la verdadera ciencia, la de la prueba y el error.

Hay una parte que confunde a los principiantes, y es creer que para utilizar el computador es necesario saber cómo se arma éste, ó ser expertos en sistemas operativos. Es casi como creer que para manejar el carro debemos ser mecánicos. Es satisfactorio tener un bagaje de conocimiento sobre el computador -como un reto de superación personal-, pero, por favor, hundan sin miedo esas teclas y muevan el ratón, que por eso no se va a dañar el computador.

¿Saben un secreto?. Todos los que hoy posan de sabihondos en cosas de informática, también fueron chapuceros en sus inicios. Lo que pasa es que, como dice el dicho, ningún cura se acuerda cuando fue sacristán. Por ello, el primer paso positivo es convertirse en Juanito Preguntón y apuntar en unos papelitos cómo se hace cada una de las cosas básicas, cómo prender el equipo, que es solamente cosa de presionar unos botones.

Ahora, manos a la obra. Lo primero que debemos saber es que estamos en la era del sistema operativo Windows. Su primera versión fue lanzada en el año 1995 -bautizada por ello como Windows 95- y que después del Windows 98 y del Windows Millenium va actualmente por el Windows XP. Ya no se justifica tener equipos que apenas soporten el sistema operativo MS-DOS y la interfaz gráfica de Windows 3.1, porque estaremos desperdiciando muchas de las fortalezas de la comunicación a Internet y la reproducción de audio y video. Incluso, el Windows 95 ya se considera obsoleto.

Lo segundo que debemos tener presente es que el computador se hizo para recibir órdenes de las personas que lo manejan. Él sólo, por sí mismo, no hace absolutamente nada. La inteligencia humana es la que hace que haga las cosas. Y eso de que los computadores dominan al hombre y al mundo, es cosa únicamente de películas. Así que, ¡pilas!. [Continuará]