Bandera de Córdoba Escudo de Córdoba Escudo de Montería Bandera de Montería
Bandera y Escudo de Córdoba Bandera de Colombia       Escudo y Bandera de Montería

| Inicio | Aviso Legal | Correo | Créditos | Mapa del Sitio |

Conozca su Computador

Carlos Crismatt Mouthon

[458] Windows 7 [51]

Por: Carlos Crismatt Mouthon

Hay que aprovechar el tema del borrado de archivos en Windows 7, para divulgar otros puntos de vista sobre la manera óptima de eliminar cualquier información de un disco duro. Si bien anotábamos en la columna anterior la posibilidad de reescribir los archivos, ¿es ésta una solución infalible?

Para intentar explicar lo que piensan los investigadores del tema, se debe comenzar por recordar que la información se guarda en la superficie de un disco duro gracias a que sus platos tienen una cubierta de material metálico en la que se alinean las partículas magnéticas por acción de las cabezas, en secuencias que corresponden a los unos y ceros del sistema digital binario.

Se conocen cuatro formas de eliminar esa información, dos lógicas y dos físicas. La primera lógica, conocida como de eliminación, utiliza el formateo, el borrado de la partición y el comando "Eliminar" del Explorador de Windows -ya sea pasando la información a la "Papelera de reciclaje" o "borrándola de forma permanente"-, pero que puede ser recuperada fácilmente con programas gratuitos.

La segunda, llamada de purga, es la que utiliza la técnica de reescribir los sectores ocupados por los archivos con el Método Gutmann y sus variantes. Estos métodos de reescritura -a pesar de ser muy seguros- tienen sus detractores. Y, ¿por qué? Los investigadores aseguran que en los discos duros quedan sectores a los que no pueden tener acceso los procesos lógicos del sistema operativo.

Un ejemplo que vale la pena comentar es que los discos duros son elaborados con mayor capacidad de la que muestran, y el espacio sobrante -que está oculto para el sistema operativo-, tiene como finalidad servir de zona de repuesto -en inglés se llama "spare sectors"-, en el que se ocultan los sectores malos del proceso de fabricación. Al espacio bueno que queda se van pasando automáticamente los sectores malos que aparezcan posteriormente. Claro, que llega un momento en que los sectores buenos de reemplazo se acaban, y aparecen sectores malos cuando se corren comandos como "Chkdsk".

Es allí, en esos sectores ocultos, en donde puede permanecer información a donde los programas que usan la reescritura no pueden llegar, pero que otras utilidades que acceden directamente al disco duro sí pueden recuperar.

Ahora bien, la primera forma física, es la desmagnetización -la llaman "degaussing"-, que como su nombre lo sugiere utiliza equipos especiales para realinear todos los puntos magnéticos que existan sobre la superficie del disco duro, quedando la información en cero. Esto crea un problema adicional, y es que el disco pierde el formateo de bajo nivel que le hacen en la fábrica y queda inutilizable. Hay que anotar que los discos duros actuales no son compatibles con los programas de formateo de bajo nivel, como "HDD Low Level Format Tool" y la utilidad incluida en las BIOS antiguas.

La segunda forma, es la destrucción, que abarca desde la desintegración de la superficie de los platos con ácidos ó con fuego, hasta la trituración del disco duro.

Para el usuario común, lo mejor es guardar la información delicada en una carpeta especial, para aplicarle -sólo a ella- el Método Gutmann cuando se descarte el disco duro, lo que abrevia el proceso.

Esta es una serie publicada desde octubre de 2001 por el periódico El Universal de Cartagena de Indias, en la edición de Montería [Córdoba] de los días sábados.
© Carlos Crismatt Mouthon

 

 
Eres el visitante # desde Agosto 30 de 2007