Antes de las modernas plantas telefónicas, la forma de llamar era mediante centrales en donde las operadoras hacían la conexión entre los usuarios. Muchas veces tenían que hacerse contactos entre las diferentes centrales, para lograr la comunicación. Unos de los primeros teléfonos fueron los de magneto, que generaban su propia corriente eléctrica mediante el giro de una manivela colocada a un lado del aparato, y que a su vez enviaba el toque de llamada a las telefonistas. Estas no necesitaban ser especialmente hábiles, ya que solo tenían que hacer un trabajo repititivo, conectando y desconectando los cables, pero eso sí, muy discretas, ya que se enteraban de las conversaciones. Fueron muchas las simpáticas anécdotas que se sucedieron con el uso de este primitivo sistema telefónico.
Teléfonos de magneto, para trabajar con operadora. La manivela permitía generar su propia corriente y enviar la señal a la central.
Luego se introdujo el teléfono de disco, que de acuerdo con la amplitud del giro generaba una señal eléctrica que a su vez representaba uno de los 10 dígitos. La primera planta de este tipo fue instalada por la Empresa de Teléfonos de Montería, en la esquina de la carrera 5a. calle 28, y la marcación era de tres números.
Local de la antigua Empresa de Teléfonos de Montería, en la esquina de la carrera 5a. con calle 28. Encima de la puerta -en el dintel- aún se se lee la palabra "TELEFONOS".
Desde 1950 la empresa Telecom tuvo presencia en Montería, especialmente en la prestación del servicio de marconigramas, que eran los mensajes enviados por transmisión inalámbrica. Se llamaban así porque el gobierno había suscrito un contrato con la American Marconi Company para usar los servicios de la "telegrafía sin hilos" que inventó Guillermo Marconi. Aún hoy se utiliza la palabra "marconigrama" como sinónimo de telegrama.
El 1 de marzo de 1968, durante la presidencia de Carlos Lleras Restrepo, Telecom adquirió a la Empresa Telefónica de Córdoba. Su nueva sede, con modernas plantas, fue construida en la esquina de la carrera 2a. con calle 33, lugar que aún ocupa luego de su liquidación y conversión en una nueva empresa, que trabaja bajo la misma razón social.
Teléfonos de disco, que de acuerdo con la amplitud del giro generaba una señal eléctrica que a su vez representaba uno de los 10 dígitos.
Aunque ahora parezca gracioso, para evitar que la gente pasara penas por la novatada y tuviera accidentes con el dedo índice, el disco traía grabadas precisas instrucciones sobre la manera de alzar la bocina y marcar los números.
El dial del teléfono traía precisas instrucciones para evitar accidentes con el dedo índice.
Este no es un estudio exhaustivo, sino tan solo los apuntes de un breve recorrido por los recuerdos de una época, que por fortuna aún se mantienen vivos. |